Hoy te vi en el parque
imposible y sin títulos
como un paisaje de palmeras atascadas
bajo una fuente en su profano viernes.
El parque esta lleno de mitos y lugares
de árboles legendarios y frutos prohibidos.
Al centro un templo antiguo atestigua
el temblor de sus cimientos.
En la acera de los zapateros
entre rejas se delatan privaciones
voces frescas habituadas
a los giros bruscos.
En la otra esquina
las piezas fueron saqueadas
y la modorra quedó impresa
en sus muros.
El templo y su desleido rostro de arena
deja ver a los héroes blancos
más blancos por la mierda y la pluma
que revuelan.
No hay corono ni ofrenda
encerrados en su silencio
ensayan el día de su fuga
de vuelta a las historias
donde se sentían más vivos.
Aquí el tiempo pasa
irremediable y sin memoria
como esta autopista de antiguas
estaciones.
...el tiempo y su preciada
carga de contrabando.